El perro

miércoles, abril 01, 2009

Como alguien carente de razón
puede ser el compañero más sensato,
y aunque inteligente como un zapato
sabe mejor que nadie llegar al corazón.

Adorándonos el continuamente
sin importar circunstancia,
no sabe guardar distancia
y arriba nos está constantemente.

Sacamos de sus oídos provecho
amando su silencio eterno,
aunque de ladridos sea infierno
con ello ya esta satisfecho.

No necesita decirnos nada
que sus actos ya no expresen,
y si estos algo dijesen
sería la expresión necesitada.

Hacen de la soledad un encanto
y nuestra terapia es su paseo,
le cumplimos todo deseo
con tal de evitar su llanto.

Un perro es todo cuanto su dueño
es la irracionalidad del sentimiento,
la fidelidad en movimiento
lo que pedimos… es nuestro sueño.

                          Osvaldo Facundo Benítez Meabe