Contemplándote

suave caricia de la brisa,
da justo a tu pelo,
que enreda en su brillo,
el atardecer soñado de este enero.

tus ojos reflejan el encanto del momento,
mientras tus pies pisan el suave frío del cemento,
tu cuerpo entero ya es monumento,
empotrado como esta al pavimento.

de temple sereno y mirada clara,
así esta tu cara mirando al cielo,
buscando a lo lejos aquella estrella,
que pueda ella igualar tu belleza.

contemplándote a un lado,
esta mi ser impresionado,
por tanta belleza rebalsado,
por tanto amor hipnotizado.-

                      Osvaldo Facundo Benitez Meabe.-